Coronavirus…¡qué pesadilla! Mercados volátiles, noticias escandalosas…tantas cosas pasando a la vez que lo han hecho pensar en postponer sus planes de emigrar a los Estados Unidos. Pero, está seguro de estar tomando la decisión correcta? ¡Piénselo dos veces!
Contrariamente a lo que puedan considerar algunos inversionistas, este no es el momento de postponer sus planes de solicitar una visa. Al contrario, es el perfecto momento para solicitar su visa. A continuación le presentamos 3 razones.
1. Recuperación económica de los EE.UU. vs otros países
En medio de las crisis, tendemos a olvidarnos que todo pasará y que las economías del mundo se van a recuperar. La crisis del coronavirus no es la excepción.
La rapidez en la recuperación de los países va a depender del músculo financiero que cada una de las naciones del mundo tenga para afrontar la crisis. Históricamente, Estados Unidos ha tenido la capacidad de recuperarse rápidamente y a su vez ser motor de recuperación de varias economías en el mundo.
Para ser más precisos, vale la pena destacar que según el Foro Económico Mundial (www.weforum.org), se estima que la economía de Estados Unidos se recuperará en el tercer trimestre de 2020. La economía de la Unión Europea, por el contrario, tardaría el doble del tiempo, estimándose una recuperación hacia el primer trimestre de 2021.
Con un panorama menos optimista se encontrarán las economías Latinoamericanas. Según el Fondo Monetario Internacional, las economías de América Latina, que ya mostraban signos de debilidad antes de la crisis del coronavirus, tardarán un poco más en recuperarse estimando mejorías en algún momento de 2021. (https://www.latinfinance.com/web-articles/2020/3/latam-2020-economic-recovery-will-not-happen-imf).
2. Largas esperas en consulados y USCIS
El departamento de inmigración de los Estados Unidos está trabajando a la mitad de su capacidad. Aunque las peticiones de visa introducidas dentro de los EE.UU. se siguen procesando, los consulados Americanos en el extranjero permanecen cerrados. Naturalmente, la operatividad a media máquina trae consigo un retraso en el procesamiento de las visas.
Una vez que los consulados comiencen actividades de nuevo, tendrán una lista de personas esperando que sus citas sean re-agendadas. A este atraso, los consulados tendrán que sumar las nuevas peticiones que se introduzcan y que deberán ser procesadas. Esta situación traerá como consecuencia natural un incremento en el número de solicitudes de visa.
Como si ésto fuera poco, se espera que la crisis ocasionada por el coronavirus y la inhabilidad de los países de afrontarla atraigan más inversionistas a radicarse en los Estados Unidos.
A consecuencia, sólo las peticiones que estén listas y que se introduzcan apenas abran los consulados podrán escaparse del inevitable retraso que se espera. En el pasado, bajo condiciones normales, las citas en algunos consulados han tardado varios meses en ser concedidas.
Una situación similar se presentará en el bufete de abogados con el que trabaja. Es probable que su abogado hoy día tenga más tiempo para dedicarle al laborioso proceso que conlleva preparar un caso de visa. Una vez todo se normalice, y cuando los inversionistas vengan corriendo a contratar abogados de inmigración, probablemente deberán esperar más tiempo de lo normal para que su paquete de visa sea completado.
El momento para trabajar en su petición es ahora. Mientras los demás están pegados al TV nerviosos por lo que dice el noticiero, dedíquese a recaudar su documentación y envíela a su abogado. Únicamente aquellos abogados que tengan las solicitudes de visa ya listas para introducir serán los primeros en obtener citas para sus clientes. Por lo tanto, si usted frena su proceso de preparación de visa con su abogado, quedará de último en una larga fila de espera. Momentos como el que vivimos llaman a la proactividad, y lo invitamos a que, en vez de preocuparse, aproveche este tiempo y trabaje junto a su abogado para culminar su petición de visa. Tomar esta acción le permitirá no solo entrar de primero en la larga lista de solicitudes…sino de primero en un mercado donde probablemente habrán desaparecido algunos competidores.
3. Programas de apoyo a pequeñas empresas
Históricamente, el gobierno de los Estados Unidos ha apoyado a las pequeñas empresas y esta crisis ratifica una vez más la importancia que tienen operaciones con menos de 500 empleados para la economía de Estados Unidos. Esto es un hecho no indiferente que invita a la reflexión. Probablemente el nivel de ayuda directa que reciben empresarios locales del gobierno de los Estados Unidos es superior al que brindan gobiernos extranjeros a sus empresarios. Por ejemplo, el gobierno Federal hace pocos días aprobó un programa de ayuda financiera que supera los $350 mil millones de dólares destinado a las pequeñas empresas. Lo interesante del programa, es que si los empresarios usan los fondos para cubrir gastos de personal y pago de alquileres, el dinero no tendrá que ser pagado al gobierno. Usted se preguntará ¿por qué el gobierno de los Estados Unidos está dando “dinero gratis” a las empresas? Porque economías como la Estadounidense entienden que un altísimo porcentaje de sus ingresos como nación provienen de las pequeñas empresas. Como si fuera poco, las empresas formadas a través de visas de inversionistas extranjeros tales como E y L, también pueden calificar para beneficiarse de estos programas.
El punto es que en ningún otro país existen programas de apoyo a empresas que tengan el alcance y rapidez que tienen en los Estados Unidos. Todos los que tenemos la suerte y bendición de vivir en este gran país, sabemos que cuando suceda algo similar, el gobierno de los Estados Unidos seguirá de forma decidida apoyando a la pequeña empresa, la cual genera el 64% de los empleos.
